Normalmente se piensa que, todas
las observaciones astronómicas se realizan de noche, y que de día,
sólo tenemos al Sol y en ocasiones a la Luna. Pero si miras bien,
podrás ver objetos celestes
que se ven a simple vista. Te retamos a intentarlo.
La
diferencia entre el día y la noche, es que cuando el Sol está sobre
el horizonte, ilumina todas las partículas de gas y polvo de la
atmósfera, dispersando su luz e impidiendo ver las estrellas. Pero
están ahí, detrás de esa capa iluminada que es la atmósfera, algo
que fácilmente podemos comprobar durante un eclipse total de Sol.
Pero si cogiéramos un telescopio lo suficientemente grande podríamos
ver, en pleno día, los planetas y las estrellas más brillantes,
aunque muy poco contrastadas por la iluminación del cielo.
Aparte
del Sol (al cuál nunca hay que mirar sin el
filtro adecuado) y en las
ocasiones en
que la Luna está sobre el
horizonte si está
suficientemente iluminada,
hay otro objeto celeste que, por su brillo, se puede ver a simple
vista. Sólo
hay que saber hacia donde mirar. Se trata del planeta Venus
Este
planeta, de un tamaño similar al
de la Tierra, tiene una
atmósfera que refleja más
del 70% de la luz que le llega del Sol, y es con diferencia, el
planeta más brillante de nuestro Sistema Solar. Al tener una órbita
interior a la de la Tierra, siempre estará en las inmediaciones del
Sol, siendo visible hasta tres horas después de la puesta del Sol, o
hasta tres
horas antes de la salida de este. Desde
finales de marzo hasta
comienzos de mayo es cuando mayor brillo presentará, por lo que es
el momento idóneo para verlo, a simple vista, en pleno día. Pero…
¿hacia dónde debo mirar?
El
próximo sábado,
28 de marzo,
tenemos una buena
oportunidad, que
se repetirá en abril, pues tendremos a la Luna indicándonos el
camino para encontrarlo. A partir de las 12h
y durante el resto del día, intenta localizar a
la Luna,
la cuál está
situada a
la izquierda del Sol, a 45º de este, es decir, la cuarta parte de la
bóveda celeste. Una vez la
localices, simplemente tienes que mirar la zona iluminada de esta,
que se encuentra en fase creciente. Si unes los extremos de la zona
iluminada de la Luna,
y prolongas dicha distancia unas 13 veces, en
sentido
contrario
al horizonte, encontrarás
fácilmente a Venus a cualquier hora del día.
Esto
se podrá hacer desde
cualquier localidad del territorio nacional, sólo tienes
que localizar a la Luna y seguir las
indicaciones anteriores.